Se acerca la fecha. Es el día en
el que hacemos las maletas, miramos qué hay que meter en ellas, hacemos una
rápida lista mental y… ¡Falta casi la mitad de las cosas por preparar!
“¿He metido el bañador?, ¿Y la
crema del sol?, ¿Me he acordado de guardar una pelota para la playa?, ¿Y algo
para jugar en el hotel?”.
Y mientras, las madres sabias
doblando la ropa, cerciorándose de que han lavado y planchado todo lo
necesario, que han preparado el mini botiquín (o no tan mini…), algo de comida
para el viaje, una chaquetita por si tienen frío por la noche…
Al mismo tiempo, los padres
forzudos haciendo malabares para lograr cerrar las maletas, que, para variar, tienen
más cosas de las que se pueden meter… Un
último empujón, nosotros que para ayudarlos nos sentamos encima y….
Tras toda una tarde de
preparativos, todo un mes esperando que llegue este día, y seguramente para
muchos, una noche de insomnio…
¡¡¡ Torremolinos, allá
vamooooooooos!!!
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