domingo, 14 de julio de 2013

Entrega de trofeos y sorpresa

En el penúltimo día para unos, y último para otros, el míster los levantó a las 9 de la mañana, para desayunar e irnos a la playa para disfrutar el día al máximo.

De camino a la playa, paramos a por unas chuches, que el equipo estaba de antojo. 







Al llegar a la playa, cogimos sitio, dejamos las toallas, y nos metimos en el agua. Estuvimos jugando con la pelota en el agua, y luego con las palas. 
No sin antes cumplir la apuesta: Javi se había jugado unas aguadillas y unas collejas a que marcaba dos goles. Como no fue así, tuvo que pagar la apuesta. Pero al final, todo el equipo se hizo aguadillas unos a otros, y para las collejas, hicieron un pasillito, que uno a uno fueron pasando a recoger su tanda de collejas, incluidos los entrenadoress. 
Pero nuestro baño se vio interrumpido por tres aletas que aparecieron cerca de la orilla. Todo indicaba que eran tres pequeños tiburones, así que por precaución, salimos del agua.

Como el equipo había visto la foto de Dani posando el día anterior, todos quisieron hacerse una parecida, y este fue el resultado:











Después de la comida, bajamos al hall, a despedir a tres jugadores que se iban hoy: Guille, Sergio y Jonay. 
Fue aquí cuando se produjo el segundo mar de lágrimas, al despedir a parte del equipo. 

                        









                                                    



                     













Después, a algunos les entró la vena fotogénica, y tuvo lugar otra sesión de fotos: 


En esta tenemos a los ángelos de Charlie





















Un poco de aerobic 






















Y, cómo no, una clase de sevillanas por parte de todo el equipo: 

(Tenemos un vídeo del equipo bailando sevillanas, o supuestamente algo parecido, pero supera el límite de capacidad para colgarlo, seguimos trabajando en ello, porque es mortal). 

A las 18:15 estábamos todos abajo esperando al autobús para ir a la entrega de trofeos. Casualidades de la vida, volvimos a coincidir con Montefrío, el equipo proveniente de Granada con el que, hemos tenido tan buen rollo, que incluso nos hemos hermanado con ellos, y estamos invitados a una ronda de copas en Granada, y ellos en Villaviciosa. 
Cuando llegamos al campo, aún se estaba disputando la final de la categoría cadete, así que estuvimos esperando como no podría ser otra forma, haciéndonos fotos: 


















Y llegó la hora de que todos los equipos saltaran al campo, para esperar a que les llamaran para levantar sus  respectivas copas y medallas. 









Como les gustó bailar en el hotel, el equipo se puso en una especie de corrillo, para bailar las sevillanas de nuevo:





Y llegó la hora de la foto de equipo antes de recoger la copa 









Como nosotros somos benjamines, fuimos la última categoría en recoger su premio, así que, en cuanto Montefrío tuvo su copa, vinieron a hacerse una foto con nuestro equipo:







 Cuando llegó nuestro turno, el Montefrío nos hizo un pasillito para subir a por nuestra copa:














Después, con las dos copas, volvimos a hacernos fotos los dos equipo juntos:










Y llegó el momento de que nuestra presidenta Sonia pusiera las medallas a los jugadores: 







Con la copa en la mano, cada jugador se hizo una foto y otra junto a sus padres.






















































Después de todas las fotos, volvimos al autobús, donde después de dejar al equipo de Montefrío, fue el momento de la sorpresa: 

Entradas para el parque de atracciones del Tívoli. 

 Si el autobús ya era una fiesta, cuando se enteraron más aún.
El equipo se montó prácticamente en todas las atracciones que había:












































En la lanzadera gran que al principio todos los que tenían la estatura decían que se iban a montar, solo se montaron Luis y borja. 





Pero nada más bajar, lo primero que hicieron, tanto Borja como Luis, fue tirarse al suelo.


Para despedir el parque, nos montamos todos en la atracción de agua, para volver fresquitos al hotel.
A la llegada, el mister nos invitó a unos helados antes de acostarnos, y despedirnos todos, ya que era nuestra última noche en el hotel.


No hay comentarios:

Publicar un comentario